miércoles, 21 de febrero de 2007
martes, 6 de febrero de 2007
AFORISMOS RECIENTES
El amor es el único consuelo cuando el sexo no alcanza.
Los cigarros al igual que mi vida me carcomen lentamente. Es prueba que sólo soy eso: podredumbre.
Cada vez que pienso suicidarme, se me viene a la mente una hermosa mujer. Entonces me pierdo en la discusión del motivo primordial y termino masturbándome.
Cuando salgo con una mujer por primera vez y me pregunta: ¿Qué es lo que más te gusta de mí? Sin titubear respondo... ¡tus orgasmos!
Sexo, alcohol y cigarros. Es la mejor definición que una mujer ha hecho de mí.
Como en Tajimara de García Ponce o en La mujer que no de Ibargüengoitia, el deseo ha sido primordial en mi vida... sólo eso: el deseo.
Las tabernas siempre son lugares cálidos y amables (no me crean, es de Jack London).
El grado de imbecilidad de las personas, se mide por las horas / nalga que se la pasa frente al televisor.
En honor a Nicanor Parra.
Señores, desde este momento mi cuerpo ya no se llamara cuerpo.
Como mi cuerpo se parece mas a un camión recolector de basura
Que a un cuerpo digno de un humano. Desde hoy lo llamare así: Camión
Recolector de Basura.
Las putas (las que cobran), no deberían santificarse como dijo un poeta. Ya que son lo más terrenal de este mundo. Lo que si se debería hacer, es que gozaran de una pensión igual o mayor a la de los presidentes. ¿Quién sirve más al pueblo?
El amor es el único consuelo cuando el sexo no alcanza.
Los cigarros al igual que mi vida me carcomen lentamente. Es prueba que sólo soy eso: podredumbre.
Cada vez que pienso suicidarme, se me viene a la mente una hermosa mujer. Entonces me pierdo en la discusión del motivo primordial y termino masturbándome.
Cuando salgo con una mujer por primera vez y me pregunta: ¿Qué es lo que más te gusta de mí? Sin titubear respondo... ¡tus orgasmos!
Sexo, alcohol y cigarros. Es la mejor definición que una mujer ha hecho de mí.
Como en Tajimara de García Ponce o en La mujer que no de Ibargüengoitia, el deseo ha sido primordial en mi vida... sólo eso: el deseo.
Las tabernas siempre son lugares cálidos y amables (no me crean, es de Jack London).
El grado de imbecilidad de las personas, se mide por las horas / nalga que se la pasa frente al televisor.
En honor a Nicanor Parra.
Señores, desde este momento mi cuerpo ya no se llamara cuerpo.
Como mi cuerpo se parece mas a un camión recolector de basura
Que a un cuerpo digno de un humano. Desde hoy lo llamare así: Camión
Recolector de Basura.
Las putas (las que cobran), no deberían santificarse como dijo un poeta. Ya que son lo más terrenal de este mundo. Lo que si se debería hacer, es que gozaran de una pensión igual o mayor a la de los presidentes. ¿Quién sirve más al pueblo?
Hoja en blanco.
Estoy frente a la tormentosa e insignificante hoja en blanco. Un incontrolable deseo por sangrar el himen virginal de la hoja se apodera de todo mi cuerpo y trato de balbucear aunque sea un furtivo pensamiento. No me es posible. Tal vez sea por el litro de whisky que he ingerido en una hora. Como termitas mis pensamientos se aglomeran en un carnaval de orgías inusitadas y experimento un trance de letras, mujeres, peleas, mujeres, mujeres y más mujeres. No me es posible imaginar un mundo sin ellas. Aunque para ser sincero he pasado mucho tiempo sin ellas. Y no es que me queje, es simplemente que el placer lo he tenido que pagar, a costa de lo que sea. He pasado hambre y miseria. Pero valió la pena, He gozado del placer más preciado: coger. Coger como un desquiciado enfermo mental.
Estoy frente a la tormentosa e insignificante hoja en blanco. Un incontrolable deseo por sangrar el himen virginal de la hoja se apodera de todo mi cuerpo y trato de balbucear aunque sea un furtivo pensamiento. No me es posible. Tal vez sea por el litro de whisky que he ingerido en una hora. Como termitas mis pensamientos se aglomeran en un carnaval de orgías inusitadas y experimento un trance de letras, mujeres, peleas, mujeres, mujeres y más mujeres. No me es posible imaginar un mundo sin ellas. Aunque para ser sincero he pasado mucho tiempo sin ellas. Y no es que me queje, es simplemente que el placer lo he tenido que pagar, a costa de lo que sea. He pasado hambre y miseria. Pero valió la pena, He gozado del placer más preciado: coger. Coger como un desquiciado enfermo mental.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)